La punción ovárica es un procedimiento ambulatorio con anestesia, que permite extraer los ovocitos de los ovarios para fecundarlos en el laboratorio o para congelarlos si lo que se desea es preservar tu capacidad de gestación para el futuro.
Una de los grandes beneficios de los tratamientos de reproducción asistida es que se adaptan a las distintas necesidades de las mujeres, hombres o parejas que padecen dificultades para convertirse en padres.
Así, existen técnicas más simples y de menor costo y, otras más complejas que amplían las posibilidades de éxito cuando ya se ha perdido la esperanza. Los tratamientos permiten conseguir un embarazo en el corto plazo o conservar la fertilidad para el futuro y ser padres en el momento que se decida.
La aspiración folicular o punción ovárica es uno de los procedimientos más usados. Se trata de una intervención ambulatoria e indolora que permite extraer los ovocitos desde los folículos -que son estructuras rellenas de líquido donde maduran los óvulos- para ser sometidos de manera posterior a alguna técnica de reproducción asistida. (congelarlos y/o fecundarlos)
La aspiración de ovocitos debe estar procedida de la estimulación ovárica que consiste en conseguir que en los ovarios crezcan el mayor número de folículos posibles en un solo ciclo.
Si la mujer o pareja desean concebir en el corto plazo, los óvulos obtenidos pueden ser sometidos a un proceso de fecundación in vitro (en laboratorio) para obtener embriones que serán transferidos al útero materno. Si lo que se desea es preservar la fecundidad para el futuro, la opción es criopreservar o congelar los óvulos o los embriones.
La punción ovárica es un procedimiento habitual, confiable, seguro y rápido que se realiza desde hace más de 30 años y que también se puede aplicar a mujeres que deciden donar sus óvulos.
¿Cómo se realiza la aspiración folicular?
Lo primero que debe hacer alguien que evalúe recurrir a un procedimiento o tratamiento de fecundación asistida es visitar a un especialista o clínica dedicada a este ámbito para evaluar la fecundidad de la paciente o pareja, y determinar los pasos a seguir.
Si el médico junto a la paciente determinan que éste es el camino óptimo se seguirán los siguientes pasos:
• La paciente será sometida a un proceso de estimulación ovárica para garantizar una mayor recolección de óvulos y aumentar de esa forma las opciones de gestación. Sin este mecanismo y de forma natural, habitualmente se obtiene solo un óvulo. Durante este proceso se realizarán controles ecográficos para examinar el crecimiento de los folículos en el ovario y cuando estos alcancen el tamaño adecuado (entre 16 y 22 milímetros) se administrará a la paciente la hormona gonadotropina coriónica humana (HCG) que desencadenará la ovulación.
• Luego que la paciente ingrese a la clínica y se inicie el procedimiento, el especialista realizará una ecotomografía transvaginal, para visualizar los ovarios y los folículos que contienen los ovocitos.
• La punción ovárica, es decir la extracción de los ovocitos, se realiza mediante una aguja larga y fina que aspira el líquido folicular que contienen los ovocitos. Este líquido pasa directamente a tubos de ensayo que se encuentran a una temperatura de 37°C para preservar las características del gameto (ovocito).
Cabe destacar que el procedimiento es breve (no debería tomar más de 15 minutos) y para evitar molestias y dolores se aplica sedación endovenosa a la paciente, quien no debe ingerir comida ni bebida desde seis horas antes de la punción.
Luego que el ginecólogo acceda por vía vaginal a los folículos y extraiga los ovocitos a través de un sistema de aspiración controlado, el material es recibido por el embriólogo quien lo examinará y localizará los óvulos definirá su madurez y procederá a su congelación (vitrificación) o fecundación.
Posteriormente se informará a la paciente del número de ovocitos recuperados. El número de ovocitos obtenidos es muy variable y dependerá, principalmente, de la edad y la reserva ovárica de cada paciente.
Las innegables ventajas de la aspiración de óvulos
• Los ovarios son muy accesibles por vía vaginal, facilitando la aspiración folicular.
• Se realiza en pocos minutos y es ambulatorio por lo que paciente puede regresar rápidamente a su hogar o retomar sus responsabilidades.
¿Tiene inconvenientes?
Todos los procedimientos pueden revestir algún tipo de inconveniente, pero a grandes rasgos estamos ante una técnica segura y que no genera mayores molestias. De manera poco frecuente puede producirse dolor abdominal, que se controla con analgésicos, o sangrado vaginal leve. Si las molestias son mayores se debe informar al profesional tratante.
¿Qué sigue tras la extracción?
Los ovocitos son clasificados de acuerdo a sus características -como madurez y morfología- y posteriormente almacenados en una incubadora en cápsulas debidamente rotuladas con la identificación de la paciente. El control y la trazabilidad de cada célula es un aspecto prioritario del proceso.
Como decíamos, los óvulos se pueden aspirar con distintos fines: para la realización inmediata de tratamientos de reproducción asistida, para conservarlos y concebir en el futuro o para la ovodonación (donación de óvulos).
Para la fecundación de los óvulos con los espermatozoides existen dos procedimientos:
• Fecundación in vitro (FIV): En él, los ovocitos y los espermatozoides se ponen en contacto y se espera la fecundación.
• Microinyección espermática o ICSI: Mediante una microaguja se introduce un espermatozoide en el citoplasma del óvulo, facilitando la fecundación. Es el procedimiento más frecuentemente utilizado.
Recomendaciones: Especialistas certificados e instalaciones apropiadas.
Para realizar el procedimiento de aspirado folicular se aconseja acudir acompañada a la clínica, ya que es posible que la sedación requiera acompañamiento en las horas posteriores a la intervención.
Además, es recomendable que el día de la punción se guarde reposo y volver a la rutina habitual de manera progresiva.
Aunque es un procedimiento seguro, es esencial que la punción sea realizada por un equipo con experiencia comprobada para evitar complicaciones y para garantizar el éxito del posterior tratamiento que te ayudará a concebir.
